Polenta y queso.
Lo que sigue es una idea que saqué del envase de polenta de cocción en un minuto. Teníamos un día frío, bastante ventoso, nubladoso, de esos tipo espantoso. Por la tarde estuvo más lindo, con sol, vientito no tan molesto.Volví del gimnasio con ganas de comer polenta en el almuerzo, con queso. Al buscar polenta en la alacena, en el paquete que tomé, justo venía una receta de cuadraditos de polenta y queso. Leo los ingredientes y tenía todo, en particular, la cantidad necesaria de queso mantecoso.
Hay diferencias importantes entre lo que cociné y la propuesta que hace Arcor S.A. Ellos proponen 500 gr de queso, 1 taza de leche y 1/2 taza de polenta. Algo sobra o algo falta, porque, o es mucho queso o es muy poca polenta, si bien la proporción sugerida entre leche y polenta está bien.
Lo que hice va a continuación, que me parece un poco más acertado.
Ingredientes.
2,5 tazas de polenta (común o de cocción rápida)
2 cebollas
3 dientes de ajo
2 tazas de leche
Aceite de girasol, cantidad necesaria
Agua hirviendo, cantidad necesaria
500 gr de queso mantecoso (tipo cremoso)
6 huevos de gallina (soltera ella)
Pimienta negra molida, al gusto
Comino molido al gusto (sabor muy dominante, usar con cuidado)
Ají molido, una cucharadita
Recipientes de cerámica de unos 13 cm de diámetro interno
Preparación.
En un bowl colocar la polenta y agregar la leche fría, remover un poco, dejar reposar. Reservar.
Poner agua a hervir, abundante. Reservar.
Picar chiquitito la cebolla y el ajo. En una olla grandecita, colocar un fondito de aceite, calentar suave, agregar la cebolla y el ajo, que se caliente todo junto, remover seguido con cuchara de madera, para que se cocine parejo. Si se seca, colocar chorritos de agua hirviendo. Cuando la cebolla está traslúcida agregar la polenta remojada en la leche, todo junto. Remover, levantar la llama de la hornalla, remover bien hasta que todo está bien calentito, sin grumos, agregando agua hirviendo. Queda una pasta pesadota.
Para que no se pegue tanto en el fondo de la olla, abajo le puse un difusor de aluminio grueso.
Esa pasta pesadota cada vez pide más agua hirviendo, y una sigue removiendo porque se va cocinando parejito, agregar la pimienta negra molida, el ají molido y el toque de comino molido. Mezclar bien. Una vez que se nota a la polenta bien cocida, apagar la hornalla. A mí me quedó como una pasta espesa, algo fluida, blandita.
En los descansos hay que cortar el bloque de queso en cubitos. Cubitos de 2 cm de lado.
Cubitos, para que se derritan con más facilidad con el calorcito de la pasta pesadota. Remover bien, cosa de mezclar bien el queso.
En los descansos, cascar los 6 huevos en un bowl limpio, batirlos bien.
Poner a calentar en el horno recipientes de cerámica. Al retirarlos calentitos, enmantecarlos con un pincel (no quemarse los dedos)
A esta altura, la polenta ya está tibia, lista para recibir los huevos batidos. Con paciencia remover para incorporar el líquido a la pasta. Paciencia, de a poco se va mezclando bien.
Una vez terminado este paso, colocar las porciones individuales en los recipientes. Colocar a estos en el horno moderado hasta que se doren y se cueza el huevo.
Al servir, los retiramos del recipiente y quedó como un "pancito", como se ve en la fotografía.
A la "pasta" que sobró, bastante, la coloqué en un molde rectangular, la cubrí con 2 separadores y la llevé a la heladera hasta que la utilice otro día.
Para acompañar, ensaladas varias, crudas. Lechuga y tomate, Repollo blanco y naranja, rabanitos en rodajitas con vinagre de vino y aceite.
Todo sin sal.