domingo, 21 de junio de 2009

Arroz con leche con azúcar negra.

Arroz con leche con azúcar negra.
Cuando hice el salmón con okusai, sobró arroz blanco, hervido, y ¿quien se lo come? ¿cómo? Es el momento de experimentar, para la cena!!!
Al arroz le puse leche entera, lo calenté deshaciendo los cascotes de granos algo pegoteados, y luego le agregué tres cucharadas generosas de azúcar negra. Revolviendo cada tanto, sin deshacer los granos de arroz.
Quedó muy rico, parecía arroz con leche con chocolate!

Salmón, okusai y arroz


Realmente, vaya yo a recordar hoy que día hice este plato! Maravilla, Lelio le sacó una foto.
Se trata de salmón rosado, okusai (que es un repollo, crucífera y todo, pero no huele tan mal como la coliflor) y arroz blanco, reblanco, solo hervido. Quedó muy interesante, por la combinación de texturas.
Las preparaciones van en el orden de tiempos.

Salmón: secar con papel de cocina las tajadas, calcular una por persona. Bañarlas con abundante jugo de limón recién cosechado, (limón bien jugoso), en una bandeja de vidrio o bien de acero inoxidable. Dejarlo macerar hasta utilizar.

Okusai.
Picar bien finito una cebolla mediana, (unos 150 gr), cubitos chiquititos, cebolla valenciana o blanca mejor. Rehogarla en aceite vegetal hasta que estén transparentes y larguen juguito.
Unos 300 gr de okusai, o repollo japonés (a todo lo raro le llaman "japonés"), cortado en juliana, bien finita, 2 a 3 mm cada tirita (para esto se necesita un cuchillo bien afilado), agregarlo a la cebolla ya transparente. Revolver cada tanto, hasta que tome un colorcito castaño claro. Condimentar con jengibre en polvo y pimientas blanca y negra recién molidas.

Arroz.
Mientras se pone transparente la cebolla, acondicionar el arroz. Una medida de arroz 00000, grano largo fino, y 2 medidas de agua filtrada. Poner la olla al fuego, revolver cada tanto, agregar agua hirviendo, hasta que los granos queden bien cocidos y no se peguen tanto entre sí. Lleva alrededor de 15 minutos.
Seguir revolviendo el okusai.

Salmón.
Aceitar una fuentecita de tamaño adecuado, en la cual quepan ajustaditas las tajadas de salmón sin encimarlas. Espolvorear el salmón por ambos lados con pimienta negra y jengibre en polvo. Rociarlo con aceite vegetal y llevar la fuente al horno fuerte unos 10 minutos.

Armado del plato.
En un plato precalentado, una buena cucharada de arroz blanco, tratar que quede más o menos de forma elíptica; al lado, la tajada de salmón, y cerrando el triángulo, una buena cucharada del okusai.

Antipasto: Como de costumbre, lechuga romana sin la nervadura central, cortada bien finita, una cucharada no muy generosa de una mezcla que tenía en la heladera de papas en cubitos mezcladas con zanahorias en cubitos, con huevo duro picado grueso y todo ligado con mayonesa; un rollito chiquito de jamón cocido, queso cuartirolo, queso pategrás y un restito de un quesito untable en cubitos. Quedó bien colorido.